Viendo pasar los pensamientos
Aprendiendo a estar en el momento presente, veo cómo los pensamientos pasan ante mí, observo cómo vienen de algún lugar ruidoso, rencoroso, contaminado.
A veces, se marchan a otro lugar más calmado, a un lugar donde amo, abrazo y perdono. Otras veces, simplemente, veo cómo se alejan, se esfuman.
Los dejo ir y junto a ellos se van las soluciones, los juicios, los deberías, las ideas, el control.
Me encuentro, soy y estoy y desde ahí empiezo a moverme.Entonces, siento en el corazón un fuerte latido, me golpea, me tambalea, siento vértigo, y yo me vuelvo a decir: Todo está bien, así es perfecto, llegará lo que tenga que llegar.